martes, 25 de marzo de 2014

Donde todos saben mi nombre




Muchas personas han pasado y seguido su camino. Muchas han pasado y se han quedado. Muchas, aún no pasan y honestamente las espero. Uniendo los eslabones de imágenes entre el pasado y el presente, un inmenso y glorioso sentimiento de gratitud me invade. No queda un solo rincón de mi alma, que no exclame con las fuerzas de los vientos la palabra "gracias" a todos los seres que he conocido en el trayecto de mi vida. Algunos de esos seres han sido maravillosos, elevados, sabios. Otros, prácticos, pragmáticos, sinceros. Los ha habido sobreprotectores y, otros, despistados. Sí, también he conocido los injustos, egoístas y envidiosos. Y claro, los depredadores que siempre están justo al lado del camino, pero para hacernos aprender, su única misión. Esos son los lobos de mar, rudos y toscos que han provocado mi océano. Porque de eso se trata; un mar en calma nunca hizo expertos marineros, es lo que dicen y es lo que es.
He conocido seres espirituales, ateos, fanáticos, agnósticos y hasta elementales. He estado junto con obsesivos, los de exceso de ego y los carentes de ego.  He compartido con amigos y con amigos que no lo son. He llorado en los hombros de personas apacibles y dulces. Y he hecho catarsis con gente solidaria y de temple. He reído hasta que mis dientes han parado, en medio de grupos de personas variopintas, sin credo, con credo, nacionales y extranjeros, heterosexuales, homosexuales y los que aún están en el closet y no saben cuándo salir…grandes amigos, de los que atesoro hermosos recuerdos. Con los que tengo mis valiosas vivencias.
He tomado un buen vino con insensibles. He tomado un vino muy malo con criaturas maravillosas y evolucionadas. He disertado con pseudo intelectuales y también con grandes intelectuales. He cantado las canciones de mi Billie Holiday con personas que no han tenido ni la más remota idea de quién fue ella y he analizado El Padrino (I, II y III) y House of Cards con críticos objetivos e inteligentes. He escudriñado la personalidad de Emma Bovary con conocedores de la Literatura y con algunos que nunca han tocado un libro.
Muchas personas me han tendido la mano, el brazo y el corazón y, por ellos hoy estoy aquí. En mis peores momentos, he tenido un par de abrazos para cobijar mis penas. En ocasiones oscuras y desesperantes, han aparecido mágicamente personas que me aúpan y no me permiten retroceder. Algunas de ellas aún me hablan, otras siguieron su sendero. Todos tenemos nuestro ciclo. 
En mis mejores circunstancias, he probado la amargura de la deslealtad y la mentira, porque así es la vida y así es Murphy con su Ley. Pero gracias, gracias, gracias por estar allí, a todo aquel que estuvo y está, de una u otra forma, en la distancia y en la cercanía. Gracias, gracias, gracias por cada palabra, por cada oración, por cada carcajada y hasta por las indiferencias. Gracias a las personas que fueron efímeras en su trato, a las que conozco de toda la vida, a las que acabo de conocer, a esas que acabo de “descubrir” y a todas las que me faltan también.
Gracias, gracias, gracias porque muchos me aceptan tal y cómo soy, con mi cruzada por los animales indefensos, mis inciensos, mi enfatuación hacia Kevin Spacey y mi rechazo (obvio) hacia Rihanna. Y claro, gracias por aceptarme con mi sarcasmo cotidiano. Gracias, gracias, gracias por las lindas palabras que bailan en mi conciencia, porque a pesar de no saberlo, al parecer si me voy algún día (hipotéticamente hablando) hacia una tierra lejana y extraña, dos o tres personas me extrañarían. Sí, a mi!
Me siento afortunada por el amor que he recibido en todas sus diversas formas, texturas y sabores. Me siento afortunada por todas las veces en las que fui engañada y lacerada. Ambas experiencias extremas han hecho posible que hoy escriba este post. Todo tiene un propósito y una razón. Todo tiene una causa y un efecto. Nada de lo vivido ha sido tiempo perdido, porque cada momento se ha convertido y transformado en experiencias que laten en cada uno de mis chakras y me llenan de orgullo. Hoy puedo decirle a la vida a todo pulmón: "hey, pruebame, que resistiré".
Gracias, gracias, gracias porque tuve el mejor amigo del mundo y zonas aledañas, mi padre, mi maestro, el amor de mi vida. Quien me enseñó el valor de la humildad y la honorabilidad y quien me quiso hasta su último respiro en este plano. Quien a través de su alma, acompaña cada paso que mis pies seis y medio recorren. Y mil gracias más porque tengo un gran amigo en esta vida y de muchas anteriores, mi hijo Manuel.
Soy afortunada y bendecida porque cada día comparto con grandes personas, quienes desde sus circunstancias se esfuerzan por dar lo mejor de sí y hacer de nuestra nación, un lugar mejor, ese país en el mundo que Pedro Mir soñó.
Gracias, gracias, gracias por todo y por tanto. Namastè hacia la vida porque siempre, siempre, siempre tengo la posibilidad de ir a donde todos -muchos o pocos- conocen mi nombre y se alegran de verme.

lunes, 24 de marzo de 2014

Libre, como el albedrío.


Evito hablar de muchos temas. La experiencia me ha esculpido el hábito del silencio. Me he convertido en amante de mi mundo interior, el que poco a poco crece. Asimismo, a medida de que crezco interiormente, muchas de las situaciones del exterior me resultan necias y, sí, lo sé, se trata del equilibrio entre lo interno y lo externo.
Sin embargo, disfruto en ocasiones el silencio, inclusive rodeada de personas y en especial, cuando se habla de temas políticos, históricos, sexuales y religiosos. Debo incluir en la lista, el tema de las mascotas y mi labor de rescate de perros y gatos en las calles y denuncia de caballos que arrastran carretas, pero, esa es otra historia y será otro post.

Hace una semana tuve que hablar con un gran amigo de muchos años y a quien aprecio enormemente, de uno de esos temas considerado “clasificados” por mí. De alguna forma que ahora no recuerdo, se coló el issue de las diferencias en las religiones y, el resultado de la conversación, no fue el más halagador.
Mi amigo encontró la paz en una iglesia, no es católica y tiene muchos seguidores. El encontró allí su camino, se siente feliz, pleno, seguro y, lo más importante, él se siente muy cerca de Dios. Me dijo que quiere compartir con todos los que ama, ese sentimientos tan grandioso que le ha cambiado la vida. Y yo lo apoyo, lo respeto y lo animo a seguir asistiendo cada miércoles y domingo a su comunidad. 
¿Dónde viene el punto de quiebra entre nosotros? En algo sencillo, mi amigo no entiende que todos somos Uno con Dios y que los caminos pueden ser diferentes, pero el destino es el mismo. El respeto al derecho ajeno es la paz, eso dice Benito y yo le creo. Yo también encontré mi camino de paz, de luz y de aprendizaje profundo. Mi camino no es perfecto, pero es en ese en el que pude satisfacer mis inquietudes y descubrir las respuestas a mis interrogantes. No tengo religión, me considero espiritual y cada día trabajo para ser mejor persona y centrar mi vida en el amor. 
Puedo ir a una misa católica, puedo ir a un culto evangélico o a una asamblea de los Testigos de Jehová. Quizás no esté cien por ciento de acuerdo con esto o aquello, pero ¿Quién soy para cuestionar? ¿Quién soy para creer que tengo la verdad absoluta? ¿Quién soy para pretender que otros sigan mis pasos y atraviesen mi sendero? ¿Quién soy para juzgar quién se salva y quién arde en el “infierno”? ¿Quién soy para afirmar dónde está el “infierno”?
Cada ser es libre y aún más libre de disfrutar su libre albedrío. Cada ser debe encontrar el camino en el mundo que lo conduzca a la paz, que lo haga sentir completo y resguardado. No importa cuál sea, siempre que éste sea un trazo de amor y de luz.
Mientras yo respeté la decisión de unirse a esa hermosa congregación que tomó mi gran amigo, lamentablemente él no pudo entender que yo tengo la mía. Que una no es mejor que la otra. Que no soy una impía ni llevo la Letra Escarlata en mi frente. Que mis creencias no son condenables y que ni mis acciones imputables. Y esto aplica también para él.
Soy espiritual y soy feliz de serlo. Cada día me doy cuenta de lo poco que sé y del largo trayecto que me falta, pero yo estoy dispuesta a recorrerlo. Me siento identificada con mi sendero, decretando entre el incienso y tratando de vibrar en armonía perfecta para todo el mundo y bajo la Gracia Divina. Escudriñando la sabiduría milenaria de Metafísica, es decir, más allá de la Física. Y así, cada cual debe transitar por la dirección que le toca, porque todo tiene un orden, propósito y no existen las casualidades. Estamos justo dónde debemos de estar, y, si no es así, la vida se encarga de enviarnos hacia las coordenadas precisas, las que nos dan regocijo y tranquilidad. 
Quédese donde se sienta feliz, donde ayude a los demás y donde sienta en su corazón el amor del Creador, del Supremo, de la Amada presencia Yo Soy.
Cuando Miguel Ángel realizó los frescos de la Capilla Sixtina, proeza indiscutible y admirable por lo siglos de los siglos, al dibujar a Dios casi, CASI, tocando la punta del dedo de Adán, para mí fue una hermosa simbología; quizás el genio del pincel buscaba transmitir el mensaje de Dios, Yahvé, Jehová… "Estoy cerca de ti, pero te regalo la libertad para que elijas el camino que te haga feliz."

Namastè.


Algunas diferencias entre la religión y la espiritualidad:
·        No hay una sola religión, sino cientos
·      Sólo hay un tipo de espiritualidad
 
·      La religión es para aquellos que quieren seguir los rituales y las formalidades
·      La espiritualidad es para aquellos que quieren llegar a la ascensión espiritual sin dogmas
 
·      La religión es para los que están dormidos
·      La espiritualidad es para los que están despiertos
 
·      La religión es para aquellos que requieren la orientación de los demás
·      La espiritualidad es para los que prestan oídos a su voz interior
 
·      La religión tiene un conjunto de reglas dogmáticas e incuestionables que deben seguirse sin cuestionarlas
·      Espiritualidad te invita a que la razón de todo, para cuestionarlo todo y decidir sus acciones y asumir las consecuencias
 
·      La religión amenaza y aterroriza
·      Espiritualidad le da la paz interior
 
·      La religión habla de pecado y de culpa
·      La Espiritualidad anima a "vivir en el presente" y no a sentir remordimiento por lo que ya ha pasado - Eleva el espíritu y se aprende de los errores
 
·      La religión reprime a la humanidad, y nos hace regresar a un falso paradigma
·      La espiritualidad trasciende todo y hace que uno sea fiel a uno mismo
 
·      La religión es inculcada desde la infancia, como la sopa que usted no desea tomar
·      La espiritualidad es el alimento que usted busca, que lo satisface y que le es agradable a los sentidos
 
·      La religión no es Dios
·      La espiritualidad es la conciencia infinita y todo lo que es - Es Dios
 
·      La religión inventa
·      La Espiritualidad descubre
 
·      La religión no investiga y no cuestiona
·      La Espiritualidad cuestiona todo
 
·      La religión se basa en la humanidad, una organización con reglas
·      La espiritualidad es DIVINA, SIN reglas
 
·      La religión es causa de división
·      La espiritualidad es la causa de unión
 
·      La religión lo busca a usted para que usted crea
·      La Espiritualidad causa que usted busque
 
·      La religión sigue las enseñanzas de un libro sagrado
·      La Espiritualidad busca la santidad en todos los libros 
 
·      La religión se alimenta del miedo
·      La espiritualidad se alimenta de la confianza 
 
·      La religión se vive en sus pensamientos
·      La espiritualidad vive en su conciencia
 
·      La religión es a cargo del "hacer"
·      La espiritualidad es a cargo del "SER"
 
·      La religión es una dialéctica
·      La espiritualidad es lógica
 
·      La religión alimenta al ego
·      Espiritualidad te hace trascender
 
·      La religión te hace renunciar al mundo
·      Espiritualidad te hace vivir con Dios, no que renuncies a él
 
·      La religión es la adoración
·      La espiritualidad es meditación
 
·      La religión es continuar la adaptación a la psicología de una plantilla
·      La espiritualidad es la individualidad.
 
·      La Religión sueña con la gloria y el paraíso
·      La Espiritualidad te hace vivir aquí y ahora
 
·      La religión vive en el pasado y en el futuro
·      La espiritualidad vive en el presente, en el aquí y ahora
 
·      La religión vive en el confinamiento de su memoria
·      La espiritualidad es LIBERTAD CONSCIENTE
 
·      La religión cree en la vida eterna
·      Espiritualidad te hace consciente de todo lo que es
 
·      La religión Te da promesas para la otra vida
·      La Espiritualidad te da la luz para encontrar a Dios en tu ser interior, en esta vida, en el presente, en el aquí y ahora…


viernes, 21 de marzo de 2014

Clousure



Podemos huir de muchas circunstancias pero nunca escaparemos de nosotros mismos. Hay personas que se pasan la vida de un lugar a otro, de un amor a otro, de un oficio a otro. Son seres que nunca están solos, porque no soportan su propia sombra. El ruido en sus cabezas es perpetuo, porque el camino para el silencio es el de retorno hacia ellos mismos, y enfrentar aquello, es lo que les provoca precisamente huir ruidosamente hacia le vida.Esas personas suelen ser peligrosamente atractivas, porque tienen ese yo no sé qué es, que envuelve, cautiva, desequilibra y allí vamos nosotros, el "otro tipo de personas", cuando hacemos el contacto con las otras, las del yo no sé qué es, que resulta que sabemos què es. Enfilamos como ratoncitos encantados por el Flautista de Hamelin directo hacia el Weser. Ciegos, sordos, mudos, incapaces de ver esas banderas rojas que a cada paso nuestro, se muestran erguidas para que las tomemos en cuenta. En vano, todo es en vano. Caemos profundo en el hueco del engaño. Solo cuando es ya demasiado tarde o cuando estamos listos para recibir el diploma de la lección, bailamos la danza de las consecuencias. Y, las consecuencias, abren la segunda etapa del aprendizaje, ese que nos lleva al cierre o clousure tan necesario para sanar, perdonar y seguir adelante.El alumno está listo, se acerca el maestro…
Esto es cuando ya no tenemos miedo de ver hacia atrás, cuando no negamos lo que pasó, cuando dejamos de culpar al mundo y somos capaces de interiorizar que todo tiene un propósito, aun no sepamos cuál es. Pero nos sentamos sin prisa, en paz y sin perturbarnos, levantamos los ojos para mirar el presente y el futuro. Sabemos por qué pasó, entendemos el mensaje y damos gracias por lo vivido. Bendecimos la flauta, bendecimos al flautista, salimos del Weser, finalmente. Dejamos de huir de nosotros mismos, porque nunca fue la intención, nosotros, no somos aquellos. Nos envolvemos en el silencio.